EE.UU asesinó al líder de Al-Qaeda: lo que se espera tras su muerte y en qué afecta a los cristianos en el mundo
El pasado domingo se conoció en todo el mundo sobre la muerte del líder del grupo terrorista Al Qaeda, misma información que un día después el presidente de EE.UU confirmó y se atribuyó como una gran victoria.
Biden, quien reafirmó la muerte de Ayman Al-Zawahri, líder del grupo tras la muerte de Osama Bin Laden, ha marcado tal acontecimiento como una gran victoria para el país tras 21 años de búsqueda de los culpables del ataque del 11-S en las Torres Gemelas; según un alto funcionario de la Casa Blanca, dicha operación les tomó un mes en planificarse y ser ejecutada con éxito.
La información que manejaba los encargados de la operación por parte de EE.UU, revelaba que Al-Zawahri, de 71 años, estaba escondido en una casa de seguridad dentro de Kabul, Afganistán, junto a su familia; propiedad de la que no salía en lo absoluto sino hasta el balcón.
Fue ese balcón la clave para que la operación fuera completada, EE.UU y sus fuerzas esperaron que el líder se asomara al balcón para que dos misiles Hellfire R9X lo asesinaran; estos misiles en particular no son de los que explotan como se conoce a estas armas, sino que éstos tenían hojillas de afeitar también “cuchillos voladores” capaces de eliminar al objetivo de manera rápida; además de Al-Zawahri, nadie más murió en el suceso.
Según lo que explican personalidades que han trabajado para el sistema de Defensa de Seguridad de EE.UU, el misil Hellfire atraviesa a un único objetivo aun teniendo a otra persona cerca, «Entonces, atravesará y esencialmente vaporizará un cuerpo humano, pero alguien que esté a los pies de esta persona no resultará herido en absoluto», dijo el ex asistente adjunto de Defensa de Seguridad de los Estados Unidos, Mick Mulroy.
Al día siguiente, Biden desde la Casa Blanca celebró la victoria de la operación diciendo:
“No importa cuánto tiempo tome, no importa dónde te escondas, si eres una amenaza para nuestro pueblo, Estados Unidos te encontrará y te sacará. Hizo videos, incluso en las últimas semanas, pidiendo a sus seguidores que atacaran a los EE. UU y a nuestros aliados. Ahora, se ha hecho justicia».
Al- Zawahri era el nº2 cuando Osama Bin Laden estaba vivo, pues era su mano derecha y la mente estratégica de Al-Qaeda operando en la mayoría de todos los ataques que el grupo tuvo éxito, mientras que Bin Laden era el rostro de todos los que allí operaban; cuando éste fue asesinado, tomó su lugar pero estando escondido en Afganistán violando un acuerdo de los talibanes, el cual destacaba que tras la retirada de EE.UU, el país no podía albergar a más terroristas.
Sin embargo, muchas preguntan surgen después de su muerte, como quien tomará su lugar y que acciones tomarán debido a su trabajo estrecho junto a los talibanes; un experto en drones y veterano de operaciones especiales del ejército de EE.UU dijo que el próximo al cargo será “mucho más brutal que sus predecesores”.
«Creo que si alguien lo reemplaza, ellos serán un poco más agresivos en sus operaciones, tratarán de obtener un poco más de credibilidad con la generación más joven de terroristas», dijo Brett Velicovich, veterano de EE.UU en este tema tras la muerte de Al-Zawahri.
Asimismo dijo que el hecho de que su muerte haya sido en Afganistán muestra que podrían estar aliándose con los talibanes para competir con otros grupos terroristas y así adoptar técnicas más violentas tomando a nuevos reclutas.
Actualmente Al-Qaeda está dividido y han surgido de éste varios afiliados en todo el mundo, que van desde África Occidental hasta la India con ambiciones globales, pero no hacen ataques terroristas importantes desde 2005.
Es importante destacar que tanto Al-Qaeda como los Talibanes tienen fuertes convicciones islámicas adaptando su creencia hacia una visión bélica y extremista de quienes son musulmanes, siendo éstos practicantes del chiismo, la rama más estricta y radical del islam causando distintos conflictos entre sus simpatizantes.
Para los Talibanes, la ley Sharia es estrictamente aplicada en Afganistán reduciendo la participación de las mujeres y violando sus derechos, además de que con ella muchos otros creyentes son asesinados, por ejemplo los cristianos; pero los informes de expertos en terrorismo en Oriente Medio, esta ley no es tan radical como las que aplican Al-Qaeda y el Estado Islámico.
Estos dos últimos han sido la principal causa de muerte de miles de cristianos en África y Oriente, llamando infieles a los cristianos y sometiéndolos a las más horribles muertes por no negar su fe en Jesús y volver al islam; ambos coinciden en una visión única de crear un califato, lo que es una elección de líder religioso y político mundial que establezca solo leyes musulmanas.