«Dios me ayudó», Sobreviviente del camión de la muerte en Texas testifica que está viva por un milagro

La tragedia que ocurrió hace unas semanas en el estado de Texas donde una gran cantidad de personas murieron dentro de un camión y solo unas cuantas personas lograron sobrevivir está dejando un impactante testimonio.

La joven Yennifer Yulissa Cardona de 20 años proveniente de Guatemala, es una de las sobrevivientes de la terrible muerte de más de 40 personas dentro de un camión lleno de inmigrantes que iba desde la frontera de Texas para repartirlos por todo el camino; la joven testificó sobre lo angustiante que fueron esos momentos y como Dios la ayudó a sobrevivir.

Desde la cama de un hospital, Cardona fue la primera en hablar para los medios acerca del incidente en el “tráiler de la muerte”.

Al principio de la entrevista ella logró confirmar que se desmayó en algún momento del incidente, y que debido al poco espacio y la cantidad de personas, ella terminó acostada encima de otra persona.

“En el momento de sentarme en el tráiler, aún caminaba, estaba sentada y me recosté encima de alguien”, contó.

Asimismo relató que en el tráiler la gente gritaba desesperada por la cantidad de calor que hacia adentro además de que no tenían agua y aunque la pidieran, jamás les dieron de beber, y que a todos les rociaron encima una especie de consomé de pollo a falta de alimentos o líquidos.

También relató que dentro de ese espacio no había ningún tipo de entrada de aire y que los conductores los mantenían más encerrados cuando la temperatura subía demasiado, “Lo hacían como a propósito”, dijo ella.

Uno de los conductores solo les respondía que ya iban a llegar a su destino mientras la gente seguía sofocada por el calor; la joven por recomendación de una amiga se sentó cerca de la puerta del camión.

Cuando logró despertar de toda la tragedia, ella ya iba de camino al hospital, en donde estaba siendo tratada por una infección pulmonar.

Llegado el momento en donde le preguntaron cómo había logrado sobrevivir al momento, ella solo respondió que había sido un milagro de Dios y que oraba mucho para que todo pasara rápido y poder mantenerse en calma.

“La verdad es un milagro de Dios. Dios me ayudó, como dijo mi papá, lo que me ayudó fue la tranquilidad y estuve orando mucho para que todo saliera bien”, testificó.

Su padre también agradece a Dios por haber salvado a su hija de este trágico incidente, “Fue algo hermoso y dijimos ‘Gracias Señor porque no te la llevaste’”, dijo.