Defensores de derechos humanos alertan sobre ‘genocidio cristiano’ en África

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Los grupos terroristas musulmanes están lanzando ataques en varias naciones africanas.

El principal es Nigeria, donde decenas de miles de cristianos han muerto como parte de lo que los activistas de derechos humanos llaman un genocidio cristiano en todo el continente.

El ejército de Nigeria lanzó recientemente un cartel de sus 100 principales objetivos terroristas.

Entre ellos: el hombre más buscado de África, Abubakar Shekau, jefe del grupo terrorista islámico Boko Haram.

«Esta persona ha sido inquietante, no solo en el norte de Nigeria, sino en toda una región», dijo el Dr. David Curry, presidente de Open Doors USA.

En un video obtenido por un periódico nigeriano, el líder de Boko Haram, rodeado de guardaespaldas, se jacta de que nunca lo atraparán porque está haciendo el trabajo de Alá.

Shekau agrega que la guerra en Nigeria continuará incluso después de él.

«Creo que si el gobierno de Nigeria no lo pone bajo control, esto ciertamente podría convertirse en una idea tipo califato como vimos con ISIS en Siria e Irak», advirtió Curry.

La brutal insurgencia de Shekau ha matado a miles y ha dejado a millones desplazados de sus hogares.

«Si miras lo que está sucediendo allí, son ataques masivos solo contra los cristianos», dijo Jeff King, presidente de International Christian Concern. «De 50 a 70 mil han sido asesinados».

La misión de Shekau: convertir al país más poblado de África en islámico, y obligar a los cristianos, que constituyen la mitad de la población, a marcharse, convertirse al islam o morir.

Johnnie Moore, cristiano, y Abraham Cooper, judío ortodoxo, son coautores del nuevo libro, The Next Jihad: Stop the Christian Genocide in Africa .

«Los terroristas en Nigeria y en los países circundantes alrededor de Nigeria con estas otras insurgencias que están teniendo lugar, están tratando de cometer genocidio contra las comunidades cristianas, quieren eliminarlas a todas», dijo el reverendo Johnnie Moore.

Moore y Cooper viajaron juntos a Nigeria a principios de este año para reunirse con decenas de víctimas cristianas de la persecución musulmana.

«Muchos de ellos se sienten impotentes en este punto, nunca se sabe dónde va a llegar a continuación», dijo el rabino Abraham Cooper, decano asociado y director de la Agenda de Acción Social Global del Centro Simon Wiesenthal. «Su fe, sin embargo, permanece inquebrantable, y hablando como un rabino judío, ortodoxo, me sentí muy inspirado por su fe».

Para empeorar las cosas, en la llamada región del «Cinturón Medio» de Nigeria, donde el norte musulmán se encuentra con el sur cristiano, otro grupo terrorista formado por militantes musulmanes fulani también está aterrorizando a los cristianos.

Más de 1.400 cristianos fueron asesinados a machetazos en solo los primeros siete meses de 2020 por militantes de Fulani.

«Vienen en medio de la noche, llegan a las aldeas cristianas, queman las casas, matan a la gente, es realmente horrible», dijo Cooper.

Uno de los secuestrados es, Polycarp Zongo, pastor de una iglesia al este de Abuja, la capital del país.

El grupo terrorista publicó un video del pastor Zongo pidiendo su liberación.

«Ellos también capturaron a dos mujeres cristianas que también están aquí conmigo», dijo el pastor Zongo en el video. «Apelo a que todos hagan todo lo posible para asegurar nuestra liberación del cautiverio».

Los ataques terroristas contra cristianos están aumentando bajo la supervisión del presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari.

Es un musulmán de la tribu Fulani. Líderes cristianos nigerianos acusan al presidente Buhari de hacer poco para detener el derramamiento de sangre.

«Una cosa es cuando Corea del Norte lo hace o cuando Irán lo hace, pero esto es una democracia, tiene que haber estado de derecho en el país», dijo Moore.

La policía y el ejército de Nigeria también están compuestos principalmente por musulmanes fulani.

«Los atacantes nunca son capturados, no son procesados, los servicios de seguridad responden muy lentamente, un día completo puede continuar con los ataques y no hay seguridad y, con frecuencia, los funcionarios del gobierno proporcionarán cobertura», dijo Dede Laugesen de Save the Persecuted Christian.

Mientras tanto, la pandemia de COVID agrava la difícil situación de los cristianos de Nigeria, especialmente en las provincias gobernadas por la ley islámica Sharia.

«Cuando el gobierno envía alimentos a estas áreas, los extremistas y los líderes bajo la ley Sharia, intencionalmente están reteniendo alimentos y ayuda a personas que consideran infieles, pero estos son ciudadanos nigerianos», dijo el Dr. Curry.