Christine D’Clario canta «No hay comparación»

Christine D’Clario presenta un nuevo y dinámico sencillo, «No hay comparación», el cual formará parte de la nueva producción que la reconocida cantante y compositora estrenará próximamente y que se titulará «Hasta poder ver».

Christine trabajó en conjunto con Aaron Robertson (Elevation Worship) y Jane Williams en la composición. Ella y Robertson se hicieron cargo de la producción musical de esta canción de pop rock, que contiene fusiones de ritmos urbanos latinos. Este tema proyecta a una Christine D’Clario llena de energía y de gozo.

En palabras de la propia Christine, el nuevo tema es una celebración por ver la mano de Dios en las pequeñas victorias de la vida. «Por ejemplo», dice ella, «vencer un día de pruebas, pasar un examen, encontrar esperanza en medio de la depresión, alcanzar una meta y simplemente ver a Dios obrar en nuestro día a día. Saber que en las altas y en las bajas, Dios siempre está obrando en nuestra vida. Él es nuestro “asombroso y hermoso fiel Señor” y “no hay comparación” para su amor y bondad», expresa al hacer referencia a algunos versos de su nueva canción.

Sin embargo, este tema nació a raíz de una temporada oscura de su vida. Se inspiró en su proceso de recuperación de desórdenes de salud mental que padeció tras dar a luz a sus hijos. «En el proceso de consejería y psicoterapia que requerí para ayudarme a sanar, hubo días buenos y días no tan buenos», narra D’Clario.«Esta canción se inspiró en momentos en los que sentía mejoría y podía ver “a luz al final del túnel” en mi proceso. Y aprendí entonces que las victorias pequeñas son tan dignas de celebración como las victorias grandes. Esto es así porque todas son bendiciones por la gracia de un Dios bueno que nos ama».

La Biblia también inspiró esta nueva celebración musical, particularmente desde las palabras del apóstol Pablo capturadas en Efesios 2:4-10 (NVI)

Christine afirma que, en repetidas ocasiones durante el proceso de producción de este sencillo, se halló a sí misma con lo que describe como «una sensación de alegría y deleite» que no había sentido desde que realizó su primera producción discográfica, 17 años atrás. «Siento un renacimiento en mi ser, mi corazón, mi creatividad y en el sonido que sale de mí para glorificar a Dios y ser testigo de su grandeza en mi vida. Siento que vuelvo a empezar y con nuevos bríos», afirma con una sonrisa.