diciembre 3, 2024

Aumentan los casos de robo de cuentas de WhatsApp con la excusa de la cuarta dosis de la vacuna contra el coronavirus

WhatsApp es la aplicación que más usamos del celular. Pero un momento de distracción es todo lo que hace falta para entregar nuestra cuenta en esa plataforma y la llave para que los estafadores empiecen a escribirle a nuestros contactos para pedirles dinero u ofrecerles dólares que nunca llegarán.

Con la llegada de la cuarta ola de coronavirus, la excusa de una nueva dosis contra el coronavirus es la más usada para confundir a las víctimas y lograr que entreguen el código necesario para instalar nuestro número de WhatsApp en otro celular y seguir con las estafas. Ya había pasado lo mismo el año pasado, cuando se comenzaron a dar turnos para la segunda dosis.

La modalidad no es nueva, pero la clave está en los detalles. Uno que se replica es que llamen desde una cuenta de WhatsApp con un logo oficial, como el de la app Cuidar o el Ministerio de Salud, para hacer más creíble el usuario.

Los delincuentes llaman a la persona, simulando estar confirmando los turnos para el refuerzo de la vacuna contra el Covid-19, y explican que enviarán un código de confirmación vía SMS, que el usuario debe detallar.

La persona, ocupada con el llamado y el diálogo con esa persona, suele entregar ese número, sin leer o escuchar el aviso que envía WhatsApp, y que informa que se trata de un código para instalar y migrar a un nuevo celular y que no debe ser compartido con nadie.

“Me llaman diciendo que era un doctor, que quería reclutar gente para darle el turno para la cuarta dosis. Me pregunta cómo me había ido, entra en confianza, si había tenido síntomas. Yo misma le fui dando datos, como si me llamara desde Provincia”, detalló Nora, de 66 años.

Una vez ganada la confianza, llega el momento del pedido. “Me dicen que me van a mandar un código, que se lo diga, que ellos lo ingresan y me iban a dar el turno para junio. Me llega el código y se lo paso. Recién ahí me di cuenta de preguntarle para qué lo quería y me colgó”, explicó la mujer.

Con la ayuda de uno de sus hijos desinstaló WhatsApp y lo volvió a descargar, para recibir un código nuevo y así evitar que los estafadores puedan acceder a su cuenta. De todas formas le avisó a sus contactos por posibles llamadas fraudulentas desde su usuario de WhatsApp.

Matías, periodista, tuvo una experiencia parecida, pero reaccionó justo a tiempo. “Me llamaron directo por WhatsApp y tenían como foto de perfil el logo de Cuidar, la app del Gobierno. Me dijeron que me iban a asignar turno para la cuarta dosis, me preguntaron si había tenido síntomas y cuándo fueron las dosis anteriores”, contó.

“Primero me hizo ruido cuando me dijo ‘te vamos a dar el turno en el mismo lugar que la tercera dosis’, sin aclararme dónde había sido. Y cuándo me llegó el código me di cuenta que era una estafa y corté”, concluyó. El mensaje que recibió no dejaba dudas: “”<#> Tu cuenta de WhatsApp está siendo registrada en un dispositivo nuevo. No compartas el código con nadie. Tu código de WhatsApp es: xxxxx”

Además de prestar atención a posibles estafas y no dar nunca el código de seguridad que permite ingresar a WhatsApp, hay un consejo importante para evitar el robo de cuentas: el doble factor de autenticación.

Este sistema, que se habilita desde Ajustes > Cuenta > Verificación en dos pasos, es una doble medida de seguridad. Además del código que se recibe vía SMS hace falta un PIN de seis dígitos, creado por nosotros (y que no debe ser compartido), para poder acceder a la cuenta de WhatsApp. Es fundamental evitar el cumpleaños o datos fáciles de adivinar. Con esto activado, incluso si en un descuido les damos el código que nos llega por SMS no van a poder usar nuestro perfil en WhatsApp.

Esta segunda contraseña de 6 números nos protege, además, de otro ataque, que es el SIM swapping, en el que alguien obtiene un chip a nuestro nombre y usa nuestra línea telefónica; aunque puedan instalar WhatsApp en un nuevo teléfono y recibir el primer código enviado por la compañía vía SMS, no tendrán el segundo, que funciona como una contraseña convencional.

Si tuvimos mala suerte y nos robaron la cuenta, desde WhatsApp explican que se puede enviar un correo electrónico, en español, a support@whatsapp.com. El asunto debe decir “Cuenta falsa/robada” y tiene que incluir el número en formato internacional (con el +54 y el código de área) y la mayor cantidad de detalles posibles para recuperar nuestro perfil en la plataforma.

También podemos intentar desinstalar WhatsApp y volver a instalarlo pidiendo un nuevo código de seis dígitos por SMS. Al hacerlo, se cerrará en cualquier otro dispositivo que esté usando la app con nuestra cuenta.

Para no preocuparse por la información sensible, WhatsApp aclara que cuando se roba una cuenta los estafadores no tienen acceso a los mensajes anteriores gracias al cifrado de extremo a extremo.

De todas formas, nunca está de más avisar a familiares y amigos de la estafa porque los ladrones suelen hacerse pasar por la víctima para pedir dinero con diferentes excusas.