Gobierno chino exige «alabar al presidente» para poder abrir iglesias

Luego de toda la crisis que soportaron por causa del Covid-19, las iglesias en China vuelven a abrir pero con ciertas condiciones por parte de su gobierno.
Los cristianos deben llenar de elogios el trabajo de Jinping.
Bajo un estricto control, los lugares de culto se enfrentan a severas medidas para realizar sus servicios de adoración; los mismos deberán rendir “alabanza” al presidente del país por diversos motivos.
Durante una reunión con distintos grupos religiosos, este 30 de Mayo mediante un anuncio se precisó que “los sitios religioso reabrirán solo en áreas de bajo riesgo de infección con implementación de medidas de prevención y control de epidemias”.
Pero al parecer, esta decisión viene acompañada de ciertas condiciones que están molestando profundamente al pueblo chino.
Como requisito principal, en algunas provincias como la de Zhejiang, se deben compartir “historias conmovedoras de lucha contra la epidemia” como manera de elogiar a “la superioridad del sistema socialista chino”.
Asimismo, se les exige que coloquen banderas en grandes ceremonias el día que vuelvan a abrir los lugares; además se les pide que oren obligatoriamente por “desarrollo económico y cumplir con la comunidad humana”, los cuales son lemas que caracterizan al presidente Xi Jinping.
Pero como punto principal, las personas que se congreguen tienen “que alabar los esfuerzos del presidente para combatir el Coronavirus”; esto será evaluado en cada iglesia como medida para permitir la apertura de los templos.
En otros lugares como Lingbao, denuncian que las iglesias siempre permanecieron cerradas mientras que mercados populares que estaban al frente estuvieron abarrotados de gente; los funcionarios con respecto a este caso solo dieron una lista de condiciones que debían seguir para poder abrir el lugar.
Los pedidos en la lista requerían que “los servicios se centraran en promover y exaltar el efecto que tuvo China en el combate contra la pandemia”;además de “elogiar todo el trabajo que hizo el presidente Xi Jinping para el control de epidemias”.
Por supuesto, las reacciones no se hicieron esperar y hasta los líderes cristianos hablaron sobre quien estaba en el poder del país si se toma ese rumbo con respecto a la predicación “política dentro de las iglesias”.
«Si el Partido Comunista está en el poder, significa que el diablo gobierna el país. No tiene sentido reabrir la iglesia si tenemos que predicar sobre política», comentó un pastor.
Los cristianos dan sentido a estas medidas como un ataque más a las personas cristianas en un intento de suprimir la fe del pueblo y usando a la pandemia como una excusa para reprimir las creencias de sus habitantes.